Koseki, raza y ambición
Antonio Rivera Espinar, alias "Koseki", fue un jugador clave en el ascenso del Córdoba Patrimonio a Primera División el año pasado. Marcó el empate en el segundo duelo de play off contra el Betis, también el penalti decisivo en ese partido, además de hacer el primer gol en el partido del ascenso en Mengíbar. El ala prieguense, suma cuatro tantos esta temporada.
El jugador comenzó a jugar en el Boca FS de su pueblo donde comenzó a destacar. Posteriormente, como juvenil, marchó al Vital FS de Cabra, de la mano de Josan González, actual entrenador de la plantilla del Córdoba P.
Tras esta experiencia, jugó en dos equipos más de la provincia, el primero en el Sporting Benamejí, de Tercera División.
Fichó seguidamente por el Ategua de Castro del Río, en la categoría de bronce en su mejor etapa, donde llegó a disputar tres eliminatorias coperas con el técnico Josan al frente del conjunto castreño.
Después, el jugador prieguense tuvo doble experiencia fuera de Córdoba, la primera en el Bayyanna almeriense, en Segunda División B.
La segunda, fue mucho más exótica, estuvo en el Sepsi de Rumanía, en la máxima categoría del país centroeuropeo, donde coincidió con Cristian Cárdenas, pívot alicantino del Córdoba Patrimonio de la Humanidad.
Posteriormente, volvió a España para jugar en el Lucena, y de la mano de Antonio García disputó una eliminatoria de Copa del Rey.
En la temporada 16/17 el jugador prieguense debutó en la LNFS con el Puertollano, en la Segunda División, donde permaneció tan solo un año.
En el año 2017 llegaría al Itea-Córdoba, en el primer año en Segunda División, manteniéndose también el segundo año en la categoría, para continuar en la máxima categoría, después del ascenso en Mengibar.
REPORTAJE: Rafa Renero