Análisis de la plantilla del CCF 19-20

El Córdoba Club de Fútbol descendía a Segunda División B doce años después, tras un año de despropósitos tanto deportivos como institucionales. En esta nueva etapa en la categoría de bronce del fútbol español, el objetivo era claro: regresar por la vía rápida. Alfonso Serrano y Jorge Rodríguez de Cózar fueron los encargados por Jesús León para diseñar una plantilla que pudiese devolver al club al fútbol profesional, en detrimento de Rafael Berges. Como entrenador, un viejo conocido del fútbol español, Enrique Martín. El presupuesto de la temporada, según anunció el propio presidente, era de unos cuatro millones de euros, del cual unos 2,5 millones de euros irían directamente al apartado deportivo. Vamos a analizar cómo ha quedado la plantilla y las variantes que puede usar el técnico navarro. La portería parece ser la posición mejor cubierta. Se han incorporado Isaac Becerra, experimentado portero de Segunda División, donde destacó especialmente en el Girona, y Edu Frías, joven guardameta de la cantera del Espanyol, que viene como teórico suplente. En la defesa se cuenta con hasta siete centrales, si bien es cierto que dos de ellos actuarán normalmente como pivotes. Sólo continúa de la temporada pasada el veterano Chus Herrero. Han reforzado el centro de la zaga Víctor Ruiz (también puede actuar como lateral izquierdo), Fernando Román, Ángel Moreno (cedido por el Albacete), Djetei, Fidel Escobar (central panameño cedido con opción a compra) y Xavi Molina. Si bien es cierto que Enrique Martín principalmente usa el 5-2-2-1, parece estar superpoblada esta zona. En los carriles, por la derecha sigue Fernández y se han fichado al veterano Raúl Cámara y al joven Sebastián Castro, que también puede desempeñar funciones como mediocampista. En la banda izquierda sólo se cuenta con Jesús Álvaro, procedente del Cartagena, con la posibilidad de que juegue ahí el canterano Samu González. En el centro del campo también ha habido bastantes novedades. La medular se ha reforzado con Imanol García, petición expresa de Martín, y con los también centrales Fidel Escobar y Molina. Ya fuera de mercado llegó Luis Garrido, pivote hondureño que será inscrito en enero. La línea de mediapuntas parece la más completa del equipo. Llegó Javi Flores como refuerzo estrella, aparte de la renovación de De Las Cuevas. También ha llegado cedido José Antonio González, centrocampista pontanés del Granada, y ex de la cantera blanquiverde. Las bandas en ataque parece ser la posición menos importante, ya que el juego ofensivo por los flancos parece trabajo de los carrileros. Aquí se cuenta con Sebas, Zelu (que se intentó su salida) y la opción de Owusu, si bien el ghanés ha jugado más como segundo punta en el inicio liguero. Por último, la zona más incompleta parece la delantera. Se cuenta con Juanto Ortuño, delantero yeclano que llega tras marcar catorce goles el año pasado en el Lleida, y Gabriel Novaes, ariete brasileño cedido por Sao Pulo, de solo veinte años. Ortuño ha anotado dos goles en el inicio liguero, ambos desde los once metros. Aquí puede echarse en falta un delantero más contrastado, que se esperó hasta el último día, pero no llegó. En resumen, la plantilla parece claramente destinada a desempeñar un 5-2-2-1, que al principio de Liga ha dado resultados y portería cero, pero ha dejado un juego rácano y muy poco ofensivo. La plantilla tiene muchas posibilidades con el sistema de cinco centrales, pero muy pocas posibilidades de variar a otros sistemas, como el 4-2-3-1. En cualquier caso, la dirección deportiva confía en que la experiencia y el carisma de Enrique Martín pueda sacar provecho a una plantilla diseñada para ascender.

RAFA RENERO