José Manuel Ávila, el multifunciones
Aunque no suele ser lo habitual, hay personas que sirven para cualquier cometido, pero este caso es trasladado al deporte y concretamente el campeonato Interfútbol. José Manuel Ávila Cruz, a sus 48 años de edad y después de 25 como jugador, se ve obligado a retirarse de los terrenos de juego. La pasada jornada en el partido que su equipo disputó en El Higuerón, se puso por última vez la camiseta de jugador.
Sus compañeros del Reycon quisieron apoyarle en este último partido y agradecerle su trayectoria, ya que lo ha sido todo en este equipo, desde los comienzos cuando se denominaba Epremasa.
Azahara Joya, Acero 20 y Cristabox, ha sido también denominaciones que tuvo en las distintas temporadas que ha participado el equipo, donde se han mantenido a pesar del paso de los años, la mayoría de los jugadores de la plantilla.
Durante estos años, José Manuel ha tenido que hace de todo, incluso enfundarse la camiseta de portero cuando la ocasión lo que requerido. El equipo por encima de todo.
Pero lo que más veces ha hecho ha sido dirigirlo desde la banda. Incluso cuando ha estado lesionado, como en aquella ocasión que se rompió la clavícula, también ha ejercido de entrenador.
En época más reciente como No+Vello, también tuvo participando un par de temporadas, pero eso sí, como prioridad siempre mantener el grupo. El resultado en segundo plano.
El famoso partido de la selección de Interfutbol en el Arcángel donde formó parte, ha dejado huella en su vida deportiva, como en la todos los que participaron en aquella ocasión. Enfrentarse sobre el césped a Toni Muñoz, Paco Jemes, Julen Guerrero o Fernando Hierro, no es una oportunidad que se le presenta a cualquiera.
Por si fuese poco, José Manuel Ávila ha formado y forma parte de la directiva del campeonato, dedicándose especialmente al tema de coordinar horarios, resultados y clasificación de cada jornada.
Con el presidente Félix Esquinas ha tenido alguna que otra cuando se retrasa en su cometido, ya que a veces José Manuel saca ese carácter “gruñón y frío" que le caracteriza. Amor querido amor reñido.
Sin embargo quien realmente le aguanta a diario es su esposa Inmaculada, eso sí que tiene mérito. Una mujer que solo se deja ver en las entregas de trofeos anuales, ya que habitualmente le acompaña. Los dos críos que tienen, deportivamente también le entretienen.